Implantes Dentales

Las coronas dentales o prótesis se colocan solidariamente a los implantes. El conjunto funciona como un diente natural, donde la raíz es el implante dental y el diente es la corona.

Para asegurar la corona al implante dental se hace básicamente de 2 formas: mediante atornillado o cementado.

En las coronas atornilladas restos de alimentos quedan alojados en los pequeños espacios que dejan las roscas de los tornillos, originando un mal olor que depende de cada paciente en su intensidad.

El sistema PIFER ha elegido el cementado de coronas por sus enormes ventajas para el paciente. Además de no necesitar mantenimientos especiales de tipo alguno, otra de las ventajas es la ausencia de malos olores debido a que los alimentos no tienen lugar para penetrar en el cementado entre la corona y el implante dental.

Al tratarse de cirugía mínimamente invasiva, el sistema PIFER puede colocarse en pacientes de cualquier edad. Encuentra ciertas limitaciones en pacientes tratados con largos tratamientos con Biofosfonatos. En estos casos deberían de consultar con el médico explicando el problema previamente.
Una perdida ósea severa también puede ser un obstáculo para la colocación de implantes dentales. Usualmente las pérdidas óseas extensas de gran antigüedad (20 años o más) hacen que la implantología pueda ser algo imposible y necesite de otras alternativas. Grandes fumadores deberían de plantearse la idea de disminuir el número de cigarrillos diarios. El tabaquismo es un factor que puede propiciar el fracaso de una tratamiento de implantología dental. Un candidato adecuado con un sistema de implantología seguro hace que el tratamiento roce tasas de un éxito de un 100%. Existen varios factores que mejoran la candidatura de un paciente a la implantología dental y por tanto sus posibilidades de éxito

• Hueso adecuado
• Ausencia de enfermedades bucales relevantes
• Mordida regular
• Buen estado general del paciente
• Condición de no fumador
• Ausencia de medicaciones de larga duración

La falta de alguna condición de las anteriores no imposibilita la colocación de implantes dentales, pero podría alargar el tratamiento.

Uno de los problemas de la implantología dental es la pérdida ósea que haya podido ocurrir previamente a la colocación del implante dental. Se necesita un mínimo de masa ósea para poder colocar el implante. No todos los sistemas de implantología necesitan la misma cantidad de masa ósea y cada marca o tipo de implante dental necesita una cantidad de masa ósea determinada. Incluso un mismo tipo de implante podría necesitar de diferentes masas óseas en función del especialista que coloque el implante.

Una pieza dental puede perderse por razones traumáticas o por enfermedades infecciosas. Una ver perdida una pieza dental, ocurre una falta de estimulación del hueso residual y como consecuencia una disminución trabecular y de densidad ósea y que se traduce en una pérdida de anchura y de altura ósea. En el primer año de ausencia de una pieza dental la pérdida de masa ósea disminuye hasta un 25% y una altura de hasta 4 milímetros. En la arcada inferior esta pérdida de altura ósea llega a ser 4 veces más que la arcada superior. Con el paso de los años la pérdida de masa ósea es una constante en el hueso de las piezas ausentes.
Para el desarrollo del hueso maxilar y evitar su pérdida es necesario que existan dientes y que estos a su vez estén estimulando el hueso maxilar. La idea básica es que si no hay estimulación el hueso maxilar se va perdiendo paulatinamente. Las prótesis removibles incluso aceleran esta pérdida ósea ya que la carga masticatoria va sólo contra la superficie ósea y no a todo el hueso y como consecuencia, al disminuir el aporte sanguíneo al hueso, hay una disminución de la masa ósea. Y en el caso de prótesis removibles mal ajustadas la pérdida ósea se acelera aún más. En definitiva la cantidad de pérdida ósea puede estar influida por el sexo, hormonas, metabolismo o prótesis mal ajustadas.

• Disminución de altura y anchura ósea
• Pérdida de hueso basal
• Riesgos de parestesias
• Papel más activo de la lengua en la masticación y aumento del tamaño de la lengua con consecuencias en el habla
• Cambio del aspecto estético en el tercio inferior de la cara. Disminución de la altura facial
• Desplazamiento del mentón hacia adelante
• Disminución de la eficiencia masticatoria
• Aumento del uso de fármacos por trastornos gastrointestinales
• Efectos psicológicos y afectivos

Denominamos arcada superior al maxilar superior y arcada inferior a la mandíbula. Ante la ausencia de todos los dientes en alguna de las arcadas existen muchas técnicas y formas de realizar este tipo de intervenciones. El ser humano dispone de 16 piezas dentales en cada arcada. Sin embargo en implantología dental y de manera usual se colocan 12 piezas dentales en cada una de las arcadas.

El sistema PIFER coloca entre 6 y 8 implantes por cada arcada edéntula. En atención a los estudios realizados por el PIFER este número de implantes obedece a un mejor reparto de fuerzas en el esfuerzo de masticación y a evitar la pérdida ósea en los espacios entre implantes.

No necesariamente. Antes de tomar la decisión de colocar un implante dental se debe valorar la posibilidad de conservar el diente natural utilizando métodos clásicos como reconstrucción del diente afectado, la colocación de una funda o endodonciar la pieza dental afectada. Una pieza dental que realice esfuerzos elevados de masticación debe de mantener sus raíces intactas para el soporte del esfuerzo, y a partir de aquí es posible mantener la pieza dental.
El implante dental lo colocaremos cuando la posibilidad de mantener la pieza dental natural sea mínima o imposible. O incluso que el paciente tenga molestias persistentes. En estos casos es aconsejable el tratamiento de implantología.

Una vez diagnosticada la conveniencia de un tratamiento implantológico, dicho tratamiento consta de tres etapas. Colocación de implantes, toma de medidas y colocación de coronas. Es posible que otros métodos de implantología utilicen más sesiones o etapas, como controles, colocación de aditamentos o mantenimientos especiales.

En la etapa de colocación de implantes se procede a colocar los implantes necesarios. En el caso de la Cirugía Mínimamente Invasiva, nunca usamos sedación de tipo alguno. Una anestesia local es suficiente. El tiempo de colocación de un implante dental con el sistema PIFER es de unos 2 minutos.

En una segunda etapa que realizaremos al cabo de 60 días, procedemos a la toma de impresiones y medidas, que consiste en la toma de moldes para la posterior colocación de coronas. Estos 60 días son el tiempo necesario que necesita el implante para solidificarse (oseointegración) al hueso maxilar. Es posible que algunos pacientes necesiten más tiempo en función de su respuesta al tratamiento

En la tercera y última etapa del tratamiento procedemos a la colocación definitiva de las coronas dentales. Una vez transcurrido un par de horas desde la colocación de las coronas, el paciente puede comenzar la masticación.

Nuestro sistema de implantología carece de mantenimiento, por lo que un cepillado normal como si de un diente natural se tratara es suficiente. A diferencia de los sistemas tradicionales de implantología, PIFER ha suprimido la etapa de mantenimiento del implante, etapas que obligaban a los pacientes a pasarse anualmente por las clínicas para reajuste de las prótesis dentarias.

NO pague por ADELANTADO. Y a continuación le damos unos consejos válidos para cualquier clínica:

• No pague por adelantado. Pague por intervención efectuada. No es buen síntoma cuándo les dicen que es “obligatorio el pago por adelantado” excusándose en que son ‘normas de la clínica’ o cualquier otro tipo de pretexto.
• Si es necesario pedir un crédito, puede que la clínica ofrezca sus servicios de financiación. Este proceso consiste en que la clínica solicita el dinero al banco y en banco cuando concede el préstamo se lo da a la clínica, pero el paciente sigue siendo el responsable del pago. Si la clínica cierra o hace un trabajo no conforme con el paciente, sólo se podrá reclamar por vía judicial. El paciente debería de solicitar que le den el dinero a él y ha de ir pagando a medida que va avanzando el trabajo. Rechace cualquier transacción o acuerdo económico donde se pida dinero en su nombre y no le entreguen a usted el dinero. Hay muchas soluciones, que pasan por su banco habitual, amigos y familiares.
• En el diagnóstico-presupuesto que les entregue la clínica, apunte las intervenciones, etapas necesarias e importes pagados. Pida tickets o recibos y grápelos al presupuesto. De esta manera el paciente tendrá una información ordenada de su intervención.